miércoles, 28 de abril de 2010

El Blues del pira caldo

Estoy en la oficina pensando, leyendo cosas y trabajando. Con la mente por todos lados.

Pero, sin darme cuenta, muevo la cabeza y los pies al ritmo de un himno al “nanana che rejape”. Un extraño sonido que es fácilmente relacionado con un montón de cosas. Pero, cuáles? Bueno, hay algo ahí que suena a independencia y a algo que difícilmente pueda expresar con palabras, pero sería algo así como “aaaaaeselsonidodecomomechupaunhuevoymecagodelarisaperopordentroteextrañotanto”.

Es la colección de blues de un compañero de trabajo, que disfruto antes de siquiera darme cuenta de qué lo que estoy escuchando.

Como buen “paraguayo so’o” que soy, la melancolía y la alegría son los ingredientes más importantes para cocinarme. La alegría, porque es lo que siempre demuestro, y la melancolía, porque es lo que siempre siento en mi interior. Eso es la guarania, eso te explica el arpa, eso se expresa al tener una cultura más oral que el video de Paris Hilton (el primero). Una cultura oral que está destinada a ser trasmitida con alegría y presencia, pero siempre será recordada con melancolía porque “ya no es pues lo que era”, así mismo como Coyote o Caracol, o incluso, Faces.

Eso es el blues. Será que en realidad el blues es paraguayo? Es un eterno recuerdo de algo que, no importa cuánto lo queramos, ya no es, ya no está, ya se fue. Pero la historia es contada con mucha onda, con alegría. Ahora mismo, los Ratones me cuentan que quieren su pedazo. Simpático, simple, pegajoso. Pero no tienen pues su pedazo. Y maldicen a mi hermana y a esta ciudad, pero siguen sin su pedazo. Y así terminarán.
Porque Joe Bonamassa canta su Long Distance Blues, y yo le veo a Dionisio Villalba trabajando en España, sintiendo eso en su interior. O bien, a María Paz Kloostemborguenssen, que estudia cine en Bologna pero extraña al chipa guazú de “la chica” de su casa. No hay blues que no se adecue a nuestra paraguayidad.

Qué esperan Juan Cancio Barreto, Rolando Chaparro, Micky Napout o quien sea para salir con un “Blues de la sopa sólida”, o “El blues del 70”, o algo así, yo no sé. Con una mezcla entre guarania y blues, no habrá un solo corazón paraguayo que no se retuerza de la melancolía. Incluso el de Lucas Barrios (sí gente, el ES PARAGUAYO).

Así que mientras Memphis la blusera describe a la mujer argentina, yo les juro que relaciono esa descripción con la mujer paraguaya. Sí, paraguaya. Eric Clapton, que mucho nos robaste loco, dejáte de hinchar y vení a darnos un concierto por lo menos.

Les invito a adentrarse un poco más en el mundo del blues. Les aseguro que no se van a arrepentir.

Porque al final, si escuchan con atención, se van a dar cuenta de que el blues es casi tan paraguayo como el pira caldo del Lido.

sábado, 24 de abril de 2010

ULTIMO MOMENTO


“Le pido a Filizzola que se calle y trabaje”, dijo Nicanor
"Yo le pido al ministro (Rafael) Filizzola que se calle y que haga su trabajo", dijo Nicanor Duarte Frutos, ex presidente de la República, a la 970 AM. "Que no responsabilice al Partido Colorado por su ineficiencia", remarcó el ex mandatario.

"Le pido a Nicanor que se calle y se siente encima de un empedrado luqueño", dijo Elrockesasí.
"Yo le pido al ex Presidente Nicanor (Duarte Frutos) que se calle y se siente en un empedrado luqueño, cercano al Feliciano Cáceres, después de un partido de Luque", dijo Elrockesasí, blog especializado en política y sus nauseabundos olores, y cocina. "Que deje de venir a molestar y querer hablar de política, porque su boliche, el Partido Colorado, se convirtió en un refugio de vendepatrias y putañeros", remarcó el querido blog.


Y FELIZ SÁBADO PARA TODOS!

lunes, 19 de abril de 2010

Arse over tea-kettle.

Es la frase del día. La traducción literal sería “el culo sobre la tetera”. Se usa para expresar que algo está dado vuelta, generalmente la expresión se refiere a una persona que te causa que estés todo “así así”.

Algo así como estar completamente loco por una pequeña porción de sueño de tu juventud, una "musita urbana pop", una chica que parece una película de Guy Ritchie, con una frase de Sabina, un poema de Jim Morrison, una rockandrolleada de Liam Gallagher y un sueño de Tim Burton, todo metido en una olla, a la que le ponés salsa de soja, mayonesa y mucho orégano.

Que sabe a una pizza con panceta y papas fritas, con coca helada, un cigarrillo y una Miller, y pedazos de culotte de una niña/mujer como, digamos, Julieta Prandi o incluso Andrea Stanley (Hola Andrea, como andás?).

Mejor explicación, en Power Point.

Se podría agregar que lograr besar a esta chica tiene la explosión de un gol, tener una conversación con ella es como cuando lees una novela en la que una persona conoce a otra y vos pensás "por que eso nunca me pasa?”, pensar en ella es un alucinógeno con más amor, libertad y honestidad que el LSD que se tomó un hippie cuando agarro y escribió la balada de rock más famosa de la historia... Está llena de colores y de vida y de cosquillas y de cosas.

Y esto, mis queridos Canterinos, es algo que nunca, jamás, ni remotamente, ni “más o menos así”, ni nada parecido, semejante, quehaceracordar-a, en sus vidas, van a decir a nadie.

A menos que conozcan a la chica que yo conocí.

lunes, 5 de abril de 2010

Soy un hijo de…

Mientras hay inundaciones y terremotos, yo estoy tomando una Brahma en la vereda de mi casa.

Durante los deslizamientos de tierra y huracanas, yo estoy jugando fútbol.

Mientras hay hambruna en el mundo, yo le tiro chipa a Carlos Torres (ladrón).

En el momento en que el mundo llora sus desastres, yo lloro el bajón que una vez más viene sufriendo Olimpia. Porque soy un indio con una Notebook. Hijo de Yakaré Valija y el Mcal López. Escucho Rebolver y La Secreta. Escupo a Roberto Carlos en la cara, en su estadio y no me importa. Soy la mosca que nunca va a dejar de molestar a Brasil. Si quiero, me gano un Cannes con un proyecto sin presupuesto. Agarro una guitarra y me confunden con Dios. Me voy a Boca y pongo en su lugar a Riquelme.

Tengo más plata de la que te podés imaginar. Yo cuento. Yo decido.

Vivo casi sin animales, con el agua apenas potable. Y sobrevivo. Y me las arreglo.

Recibo un balazo en la cabeza, y mientras el mundo entero llora mi muerte, yo me preparo para el Mundial. Para qué quiero un cerebro si tengo este corazón?

No hay un arquitecto sobre este planeta que me supere. Yo construyo sobre tu tierra. Mi calor humano te causa envidia, mi simpatía celos y mi sinceridad te deja boquiabierto. Me dicen campeón en corrupción, y aunque no sea cierto y exageren y hablen mal de mí para opacarme, yo intento superarme. Con tus listas. Tus estándares. Porque mi energía no se ve nunca superada por tus máquinas, por tus prohibiciones ni mucho menos por tus comentarios.

Me tenés miedo.

Me respetás.

Si yo levanto la voz, vos te callás y bajás la mirada.

Independizo países. Genero territorios nuevos. Soy el único en la historia que nació dos veces. Trataste de extinguirme, pero prevalezco. Siempre prevalezco. Porque no podés contra mí. Por eso, hago un gol y lo celebro con una danza de guerra. Porque soy un guerrero. Soy un soldado. Y por eso, prefiero morir a verme derrotado. Con la espada o con la pluma, no pierdo batallas. Puedo escribir palabras que te transportan a un mundo que nunca vas a vivir.

Triunfo donde quiera, cuando quiera. Te dije en la cara, en tu país, en tu casa, frente a tu familia, mil y una veces: “Soy el mejor. Soy el número 1... Seguro.”
No intentes superarme. Sólo admiráme.

Hijo de la tierra roja y las naranjas, criado con mbejú, chipa yakaré y reviro. Soy el salvaje más glam que vas a encontrar. Soy el “nderakore”, el “mbochi!”, el “por qué pio?”, el “silla cable”, el “Romerito todos te quieren”, el “La mitákuña ko ichico porà sente nomás”, el “jaijue pete”, el “que pucha che ra’a”. Soy el letrado, el sucio, el que pone garra. Soy el que grita. Soy el que llora con los dientes apretados y tu cráneo en mis manos.

Soy el que necesita de su gente. Estoy hecho para mi tierra y mi pueblo. Soy el orgullo de la Naturaleza. Soy el centro. Me arrastro, me ensucio, me lastimo, pero siempre llego. Itaipú y Yacyretá no me reflejan. Crecí con mano de obra libre y patriota. Mi esposa y mis hijos van a defender mi cadáver con uñas y dientes. No busques problemas. No provoques al jaguareté. No juegues con el yakaré. No molestes al taguá.

Puedo amarte con toda mi alma.

No intentes cambiarme. No hay nada en qué mejorarme. Estoy por encima. No entenderías.

Amáme.

Odiáme.

Pero no me ignores. Ni lo intentes.

No podrías.